Hola, si, regreso con 3 meses de retraso (agosto, septiembre y octubre), pero trataré de ponerme al día en breves. Arranco por el más lejano de ellos, un agosto repleto de cosas interesante como las que aquí vengo a comentar, donde se ocultan futuras obras maestras o films de culto que, además de su calidad, comparten que duran más de 3 horas todas ellas. Curioso este nuevo estándar de las 3 horas… a disfrutar.

Oppenheimer de Christopher Nolan. Hipnotizante de principio a fin… y sin duda una de las mejores películas del director británico. Un camino de tres vías paralelas, contando una asombrosa historia desde tres puntos de vista diferentes, con tres protagonistas distintos, siendo uno de ellos la bomba. Película cautivadora donde se narran tres instantes en el tiempo donde diferentes tipos de personas viven un momento aterrador común clave en la historia de la humanidad. Sencillamente magnífica, nada más que decir.

Megalodón 2: La fosa (Meg 2: The Trench) de Ben Wheatley. Pues nada más y nada menos que una película divertida, plagada de saltos de fe (no es para menos), y sin nada que demostrar salvo ser fiel a su predecesora: en el primer cuarto de film hay atisbos de algo que nos invita a pensar en un giro hacia el terror, pero tristemente es un mero espejismo. Eso sí, hay un par de secuencias que confirman el buen ojo de Weathley (ese maravilloso plano desde el interior de la boca del tiburón o el despiporre final con pulpo gigante, megalodones y militares palmando cosa fina), pero el resto podría estar dirigido por cualquier otro cineasta estándar.

Póster del documental Woodlands Dark and Days Bewitched: A History of Folk Horror
Póster del documental Woodlands Dark and Days Bewitched: A History of Folk Horror

Háblame (Talk to me) de Danny y Michael Philippou. Sobresaliente película de terror, bastante diferente a otras realizadas pero segura de que será un nuevo clásico al igual que obras de terror moderno como la fabulosa It Follows o Barbarian. Una nueva maldición inesperada combinada con un juego a la ouija, pero a lo bestia, con unos descerebrados adolescentes que se plantan frente a frente con truculentas y podridas almas castigadas. Los Philippou riegan el metraje con un par de momentos muy violentos (uno de ellos francamente salvaje contra un menor de edad), y es de ese tipo de películas que te invita a darle una vuelta un buen rato después de disfrutarla. ¡¡¡Muy recomendable!!!

Babylon de Damien Chazelle. Tenía pendiente desde principios de año esta carta de amor a uno de los momentos más grandes y traumáticos de la historia del cine. De cómo las estrellas de Hollywood vivían en un mundo surrealista y fuera de control, de cómo las estrellas nacían sólo para sumergirse de repente en una vida demencial de excesos insanos. Por otro lado, aquellas otras estrellas que no superaron la cruel prueba del cine sonoro, y se encontraron olvidadas. Loca, divertida, triste y emotiva. Brad Pitt genial, Margot Robbie superlativa. Única en su especie. Puede disfrutarse en Prime Video.

Woodlands Dark and Days Bewitched: A History of Folk Horror de Kier-La Janisse. Documental totalmente necesario. Un profundo viaje a las raíces del cine de folk-horror que todos conocemos y hemos disfrutado, pero también de otras obras en las que nunca habrías pensado que eran de este subgénero. Increíblemente condensado, lleno de referencias, y un gran ejemplo de cómo un documental puede dar vida a una parte más que completa y desconocida de la historia del cine. Simplemente magnífico. La tenéis en Filmin.

Blue Beetle de Angel Manuel Soto. Rip-off en toda regla de Iron Man, Ant-Man y otras muchas que, sorprendente o no, resulta divertido. Creo que todas las tramas son casi iguales a las que ya vimos en las primeras dos películas de Tony Stark, pero aquí se pueden disfrutar de jugosos easter eggs dentro del universo DC y de una música bastante bien elegida y rumbosa. Se puede ver.

La Casa del Diablo (The House of the Devil) de Ti West. Una de las películas de West que tenía pendientes. Con un look and feel puramente setentero, West construye una auténtica película de terror clásico con un amplio conjunto de conceptos diversos como asesinos en serie, posesiones y cultos siniestros en ella. Bastante sorprendente y con unas presencias que hoy en día son simplemente inconcebibles… sí Greta "Barbie" Gerwig. También la tenéis en Filmin.

Los comentarios están desactivados
Publicado por Uruloki en
 

Ya avanza agosto y es momento de echar un vistazo a… Junio, que no Julio (lo sé, pero me gusta eso de ir con unas cuantas semanas de retraso). Nos adentrábamos en los meses de verano y con ellos llegaron las grandes producciones de los todopoderosos estudios. Es época de blockbuster que, sin embargo, están haciendo sudar la gota gorda a Hollywood por las malas cifras cosechadas y los fracasos económicos que durante 2023 pondrán la duda sobre la habitual rentabilidad del cine.

Spider-Man: Cruzando el multiverso (Spider-Man: Across the Spider-Verse) de Joaquim Dos Santos, Kemp Powers y Justin K. Thompson. Increíble… simplemente increíble. De principio a fin, desde la deslumbrante presentación en el universo Gwen hasta el mismísimo no-final. Porque sí, Spider-Man: Cruzando el multiverso está inacabada y tristemente tendremos que esperar al final de esta gran obra maestra. En términos visuales se encuentra en un lugar donde nadie va nunca, una combinación de estilos pictóricos, una referencia que confirma el lugar perfecto que Sony ha encontrado con este gran personaje. Maravilloso.

Póster de Spider-Man: Cruzando el multiverso
Póster de Spider-Man: Cruzando el multiverso

El exorcista del Papa (The Pope’s Exorcist) de Julius Avery. Del director de la genial Overlord tenemos aquí una curiosa película sobre el exorcista más prolífico del Vaticano. Diré que es una película bien hecha, que no aburre, repleta de clichés del género y sin demasiados momentos de miedo… sin embargo es correcta y entretendrá, eso sin dudarlo. Merece el tiempo que lleva verla, y en un momento sin tantas películas de terror con grandes arranques en ellas, esta es una que cuenta además con un Russell Crowe convincente, y gordo, recorriendo media España en Vespa.

The Covenant (Guy Ritchie’s The Covenant) de… sí, Guy Ritchie. En las antípodas del cine de Ritchie, The Covenant es una película atrevida, bien trabajada, llena de grandes secuencias de combate bélico y con un Jake Gyllenhaal que, como siempre, está perfecto. Una historia de amistad y remordimientos. Directa y sobresaliente. Buen cine de acción.

Transformers: El despertar de las bestias (Transformers: Rise of the Beasts) de Steven Caple Jr. Divertida por momentos, pero un poco aburrida por otros, llena de saltos de fe que hacen que la historia llegue a lugares inimaginables e imposibles. Visualmente cumple sobradamente y a alto nivel, en la línea de sus predecesoras, pero los agujeros en la trama, aun teniendo en cuenta que se trata de una película de ciencia ficción, dan lugar a algunos WTF que restan "credibilidad" narrativa a lo que sucede. Hay algunos chistes geniales, uno relacionado con Mark Walbergh bastante simpático, y la escena final… abre un universo compartido muy interesante y que hemos visto ya en cómic. Esperando que el siguiente encuentro nos de lo que leemos en los cómics, y se dejen de lado ciertos elementos que acaban provocando cierto sonrojo.

The Flash de Andy Muschietti. Quizás uno de los mejores fanservice que se han hecho jamás. Divertida, llena de acción y con varias presencias que harán mear a los fans de DC. Sin embargo, una vez más Flash comparte aventura con otros personajes (muchos icónicos), y la película es más un crossover que una película para el personaje titular. El problema, la película llega demasiado tarde, en un momento en el que ya se ha decidido reiniciar de nuevo las películas de DC y donde las hijas del Snyderverse están avocadas a la total desaparición y castigo ejemplar… en fin, una buena y entretenida película que gracias a presencias hace que los más veteranos pensemos eso de "gracias por recuperarlo".

Póster de The Flash
Póster de The Flash

Indiana Jones y el dial del destino (Indiana Jones and the Dial of Destiny) de James Mangold. El mejor Indi desde los tres grandes clásicos, llena nuevamente de buen fanservice, acción, aventura, y repleta de momentos desgarradores donde te das cuenta de que han pasado 34 años desde la obra maestra La Última Cruzada, que obviamente apunta ahora a la despedida de verdad. El objeto mágico común que funciona como McGuffin toda la película hasta el final está presente y vinculado a la némesis necesaria para el Dr. Jones, los añorados nazis. Perfecta como despedida de un personaje icónico.

Los comentarios están desactivados
 

Venga, ya con junio terminado, y como hace ya un tiempo que no publico nada pues decido ponerme al día con las cosas que me han llamado la atención a lo largo del mes de mayo… que no fue poco.

Scream VI de Matt Bettinelli-Olpin y Tyler Gillett. Tan sencillo como decir "otra más de la saga", pero sangrienta a más no poder. Más asesinatos no exentos de brutalidad, muchos cubos de espeso líquido rojo, serial killers de rigor y algunos giros en la trama que tristemente juegan en contra de la poca credibilidad de la película. Ojo, está bien, entretiene, pero al final hay que esperar lo totalmente inesperado y asumirlo.

Guardianes de la Galaxia vol. 3 (Guardians of the Galaxy Vol. 3) de James Gunn es la mejor película de la actual etapa del MCU, que por otro lado no es decir mucho y aun cuando gana al resto por abrumadora goleada. Es desgarradora, divertida, llena de detalles maravillosos y el mejor villano episódico en mucho tiempo. Gunn quizás se pasa a la hora de mostrar emociones, pero la película merece estos momentos por lo que parece es el punto final para el grupo original. Música bien seleccionada, tenemos una tercera banda sonora perfecta para escuchar en bucle, y como siempre gran grupo de personajes que, de alguna manera, echaremos de menos seguro. Recordad que hay dos secuencias post-créditos… ambas divertidas y entrañables. Merece ser vista en el cine, y más ahora que cada día se muere más.

Cartel de Guardianes de la Galaxia vol. 3
Cartel de Guardianes de la Galaxia vol. 3

Operacion Fortune: El gran engaño (Operation Fortune: Ruse de Guerre) de Guy Ritchie. Película poco común de Guy Ritchie: menos cómica, más seria y por momentos bastante aburrida (algo realmente extraño en sus películas). El tercer acto es sin duda lo mejor, un actioner bien elaborado con un giro inesperado, pero el resto de la película, realmente anodina, y más centrada en distraernos que otra cosa. Es complicado seguir la extraña trama incluso con buenos actores como Statham, Plaza o Grant. Está bien… pero no lo suficiente. La tenéis en Prime Video.

Air de Ben Affleck. Ese ya clásico tipo de película que se puede disfrutar sin pedir nada realmente apabullante. Un pedacito de la historia centrada en cómo se gestó uno de los contratos más lucrativos jamás firmado. Entretenida, sin más. También en Prime Video.

Oso vicioso (Cocaine Bear) de Elizabeth Banks. Inesperada, muy sangrienta, bastante divertida, aunque por momentos un pelín tocada por el tedio, y cargada de humor negro bastante cafre. Así que lo que tenemos entre manos es una muy buena comedia repleta de meloso rojo sobre unos hechos reales exacerbados hasta niveles dignos del mejor colocón. De regalo un buen reparto con rostros como los de Keri Russell, Alden Ehrenreich, Ray Liotta (fallecido poco después del rodaje) o Margo Martindale, y un oso come-hombres que se lo pasa teta.

Cartel molón de la inesperada / esperada Pearl
Cartel molón de la inesperada / esperada Pearl

Pearl de Ti West. Cómo la locura mental puede hacer florecer un personaje muy peligroso encarnado por una angelical Mia Goth (diosa). Lo que empieza como una historia ingenua que podría llevarnos por un fantasioso camino de baldosas amarillas, se acaba convirtiendo en el nacimiento de una Pearl que nada en la inseguridad y en el descontrol. La elegante presentación, en la línea de aquellos clásicos como ¿Qué fue de Baby Jane?, nos traslada a un entorno extraño y decadente, donde cuando buscas hacer realidad un sueño, son tus propios límites y demonios los que te impiden hacer cosas que no te plantearías para conseguirlo… pero claro, a Pearl se la trae al pairo todo esto. El nacimiento de una nueva estrella de los asesinos en serie. Estrenada hace poco en Movistar, en Blu-ray este junio, pero curiosamente con el film donde nació el personaje, X, en un cajón olvidad de cara a ser llevada a formato Home cinema.

Barbacoa (Barbaque) de Fabrice Eboué. Estrenada en el Festival de Sitges el año pasado, estamos ante una de esas truculentas, asquerosas y bastante divertidas películas. Recomendable no verla mientras se come o cena. Historia protagonizada por Marina Foïs, la magistral actriz de As Bestas, cuenta la historia de esta, su marido carnicero, los veganos y el jamón cocido llegado de no sé qué cerdo inexistente. De traca de maraca. Me recordó a alguna otra película, si bien esta resulta bastante macabramente fresca… en el amplio espectro de las palabras. La tenéis en Filmin.

Hasta los huesos (Bones and All) de Luca Guadagnino. Historia de amor hasta lo más profundo de las entrañas, literalmente. Fantásticas interpretaciones de Timothée Chalamet, Taylor Russell y el desesperante Mark Rylance, asquerosa a más no poder, pero diferente de principio a fin. Un coming-of-age en un mundo demasiado desagradable con más gente como los protagonistas de los esperados. Merece la pena verla. También en Prime Video.

Cartel de la fantástica Tetris
Cartel de la fantástica Tetris

Tetris de Jon S. Baird podría quedarse en eso de ser otra película basada en hechos reales, pero es sin embargo una película audaz, lúcida, superior y realmente entretenida. En lugar de contarnos la historia de cómo se creó el juego, disfrutamos viendo todos los giros que dio la historia en cuanto a los derechos sobre la famosa propiedad. Necesaria, sin duda, y con un Taron Egerton que lo pasa mal en una época de transición total para la ex-Unión Soviética. Una barbaridad que se puede ver en Apple TV. Ojito que es producción de MARV… la compañía del siempre glorioso Matthew Vaughn.

Sisu de Jalmari Helander (doble campeón de Sitges en 2010 con Rare Exports y 2022 con esta película). Con la Segunda Guerra Mundial tocando a su fin, un grupo de nazis se topa con el Rambo finlandés (Jorma Tommila). Este último hombre en pie, que se ha hecho con una generosa cantidad de oro, iniciará una sangrienta embestida bélica contra estos nazis, matando a todos de diversas formas violentas y truculentas (incluso lanzando una mina a la cabeza de un pobre soldado). Helander dirige la película de forma correcta, pero incluso pese a durar 91 minutos de metraje, por momentos parece que estamos ante una obra de dos horas en la que el señor Morfeo viene a darte las buenas noches. Pero si, hay que verla, hay que disfrutarla y hay que tomársela con paciencia. Sólo sea por el glorioso y extremo body count que atesora el Rambo finlandés este.

Los comentarios están desactivados
 

Pues no lo voy a negar, abril fue un mes flojo en cuanto a cantidad de cosas vistas en cine. Eso sí, ya sólo por Dungeons & Dragons: Honor entre ladrones (Dungeons & Dragons: Honor Among Thieves) mereció muchísimo la pena disfrutarlo y fue ideal para ir abriendo apetito de cara al cine de verano… os dejo con las dos de abril y el resto de recomendaciones, ya no de abril, pero que me apetece rescatar.

Dungeons & Dragons: Honor Among Thieves de John Francis Daley y Jonathan Goldstein. Cuando sientes en una sala de cine en 2023 la misma sensación de cuando veías las grandes obras del cine de aventuras fantásticas como Willow o La princesa prometida (The Princess Bride)… pues sólo te queda ser feliz y disfrutar. Una película endiabladamente divertida y entretenida, llena de referencias icónicas al universo de D&D, cargada de secuencias de acción geniales, y con el equipo clásico del juego de rol… un mago, un guerrero, un paladín, un cambiaformas y un bardo / ladrón… pues bien se merecen esas 2 horas que requiere. En mi top del año desde ya. Lo peor, que habiendo costado unos 150 millones se ha quedado en taquilla como poco más de 200 en global, lo que no augura un gran futuro a la posible franquicia, y eso que merece una buena ovación.

Posesión infernal: el despertar (Evil Dead Rise) de Lee Cronin. La saga Evil Dead es enorme en todos los sentidos, cine de culto, obras maestras del género, películas irresistibles de principio a fin. Todas las obras bajo ese paraguas han respirado un sentido del exceso y un estilo de lo extremo únicos. Desde los inicios con Sam Raimi haciendo la película de culto Posesión infernal (The Evil Dead), hasta el último brutal y salvaje reboot / remake de Fede Álvarez en 2013, los fans de los deadites saben que la calidad es tan alta que lo nuevo que venga tiene que seguir ese camino y no apartarse un ápice de la senda correcta. Posesión infernal: el despertar es una nueva pieza en el puzle Evil Dead pero a la vez es esa pieza que no sabes muy bien donde colocar porque tiene fallos. Lo mejor que ofrece es que recoge momentos icónicos de las otras películas y propone algunas ideas truculentas novedosas. Pero sin embargo, lo que habitualmente era una espiral de terror sin fin y una hipérbole de lo sangriento, ahora tarda cerca de 30 minutos en ofrecer lo que esperamos (y lo ofrece). Película correcta, en la frontera entre entretenilandia y aburrilandia, aunque (eso si) lo suficientemente sangrienta como para disfrutar de su último grandilocuente acto. A nivel pasta habrá más seguro.

Un póster fanmade de Evil Dead Rise
Un póster fanmade de Evil Dead Rise

Y ya está… un mes malo por mi parte en cuanto a veces que fui al cine. Las no de abril pero que tenía pendientes del pasado:

Lamb de Valdimar Jóhannsson. La triunfadora de Sitges 2021 puede verse en Filmin. ¿Qué te espera? Pues un folk horror islandés centrado en la maternidad, en la soledad más absoluta, en un entorno hostil como pocos, y en un extraño recién nacido con cuerpo humano y cabeza de cordero. Historia de cómo una vida triste y aburrida puede tornar en felicidad absoluta, pero con un oscuro secreto que se va cocinando poco a poco. Película extraña, que se toma su tiempo cosa fina, pero que finalmente te acaba sorprendiendo.

Bacurau de Juliano Dornelles y Kleber Mendonça Filho. También en Filmin (daos prisa que la quitan el 16 de junio) y también triunfadora de Sitges pero en 2019. Una nueva revisión del clásico El malvado Zaroff (The Most Dangerous Game), pero más en la línea de la película de culto El imperio de la muerte. Un pueblo olvidado y perdido en el Brasil más profundo es elegido por un grupo de fascistas liderados por el alcalde de la región para matar a todos sus ciudadanos… un juego. Como los dos clásicos mencionados, la historia propone a un retorcido juego en el que el cazador se convierte en cazado, porque los que se suponen iban a ser asesinados no se van a rendir tan fácilmente. La película transcurre en un momento no muy claro, pero la referencia fascista = gobierno de Bolsonaro es evidente dada su fecha de estreno. Tal vez pueda resulta un poco lenta, pero además de contar su banda sonora con una pieza musical del mismísimo John Carpenter (y que no pega mucho), en conjunto está bien y cuenta con unos cuantos asesinatos de esos que salpican generosamente. Además, está Udo Kier en el reparto. En definitiva, se recomienda no jugar con los ciudadanos Bacurau.

Memories of Murder (Salinui chueok) de Bong Joon Ho. Historia inquietante. Basada en los hechos reales del primer asesino en serie de Corea, la película muestra la transformación de un policía de Seúl que no cree en los métodos ilegales utilizados por los detectives locales una vez que empiezan a aparecer los primeros cadáveres. La corrupción y la falta de pistas hacen que el buen policía asuma que la forma incorrecta de hacer las cosas es la única manera de encontrar al menos un culpable… aunque éste no sea el verdadero. Una de esas que tenía en mi lista de debes y que al fin he podido disfrutar. Obra maestra del cine coreano y con el inimitable Song Kang-ho como uno de los protagonistas. Otra en Filmin.

Nos leemos en breve.

Los comentarios están desactivados
 

He aquí una de las películas sorpresa de este 2022 (y oportunidad única de verla en pantalla grande si conseguiste entrada para la maratón del Festival de Sitges 2022). Zack Cregger, director de nada conocido, guionista de no menos cosas que debamos saber, y actor en otras en las que tampoco no se nos ha perdido nada, se planta como el nuevo nombre a tener en cuenta en el mundillo del terror visto el prometedor giro que ha logrado dar a su carrera con la muy agradecida Barbarian.

Si Tess, no hay nada mejor que tirar del "hilo"
Si Tess, no hay nada mejor que tirar del "hilo"

Con poco, Georgina Campbell ("Krypton"), Bill Skarsgård (It, El diablo a todas horas o "Hemlock Grove"), y Justin Long (Jeeper Creepers, Tusk o Arrástrame al infierno) en el reparto, y un guión propio con mucha imaginación, Cregger se saca de la manga un nuevo clásico del género al construir uno de los thrillers del momento, atado en el terror más retorcido, pero no exento de mucho humor, todo el muy gamberro. Barbarian es en mucho tiempo uno de los films más imprevisibles que te puedas echar encima, y todo comienza a girar cuando Tess (Campbell) llega tarde, mal y a rastras a su reserva Airbnb. Para sorpresa de todos, protagonista y espectadores, la vivienda se encuentra ocupada por Keith (Skarsgård), y todo hace pensar que el rumbo de Barbarian está marcado y que nada bueno puede salir de esa imprevista situación. Aquí todo juega a favor del director debido el subconsciente humano y la percepción que tenemos todos del angelical rostro del joven de la familia Skarsgård. Pero pronto llegará la mayor de las claustrofobias, la entrada en un submundo imprevisto donde el aroma Wes Craven impregna las paredes, chorrean, y donde lo siniestro y atávico decide hacerse con el protagonismo, todo se vuelve radical y grotesco.

Metro en mano, AJ se enfrenta a la radicalidad de la idea de Barbarian
Metro en mano, AJ se enfrenta a la radicalidad de la idea de Barbarian

Cregger sin embargo no deja que nos regocijemos en esta nueva plaza de terror, y juega con el espectador dando unas pinceladas al funesto origen de lo que nos espera en el sótano de esa apacible casa Airbnb, y ya de paso explota otra vertiente, la comedia macarra apoyada esta en el movimiento #MeToo y la especulación inmobiliaria… curiosa mezcla. AJ (Long) es un actor caído en desgracia a los 30 segundos de su presentación, y aire fresco para que la segunda parte de la película sea el complemento perfecto de la tensa primera. Y hasta aquí llego, sigo pensando que aun pasada un semana de su estreno en Disney+ lo mejor es no seguir entrando en detalles, porque la bueno de Barbarian es saber poco o nada, sencillamente ver, sorprenderse y disfrutar hasta ese grotesco final. Gloria bendita, si señor.

Nunca sabes lo que uno se puede llevar en una maleta de viaje, Barbarian te lo cuenta
Nunca sabes lo que uno se puede llevar en una maleta de viaje, Barbarian te lo cuenta

Los comentarios están desactivados
Publicado por Uruloki en
 

Hace tiempo que no me paso por aquí, y qué mejor razón que hacerlo para dedicarle un rato a ¡Nop! (Nope), lo nuevo del siempre intrigante y sorprendente Jordan Peele. El tercer superlativo trabajo como director y guionista del responsable de Déjame salir (Get Out) y Nosotros (Us), navega en un mar que rememora eternos iconos de años atrás, con reflejos evidentes de los inmortales Spielberg o Shyamalan, pero otorgando personalidad al trabajo final, explorando el horror, la comedia, la grandiosidad de las grandes aventuras… y el western salido de las piezas musicales, obras maestras, compuestas por el virtuoso Michael Abels.

OJ Haywood y Emerald Haywood, foto de familia
OJ Haywood y Emerald Haywood, foto de familia

No lo voy a negar, soy de esos que de forma irracional adoran el cine que hace Jordan Peele. Su enfoque del error moderno, ese que muchos gustan denominar como terror elevado, es singular y diferente, siempre complejo de asimilar a primera vista, repleto de secretos, imposibles, giros y más giros, de esos que seguramente pueden acabar volviéndote tarumba o dejarte el culo roto. De ¡Nop!, extraño título el elegido pese a ser una especie de traducción directa de la expresión americana, pero en realidad un acrónimo de No Of Planet Earth, poco se puede y se debe decir.

Si no lo ves, no lo crees
Si no lo ves, no lo crees

En modo breve comentar que la familia Haywood tiene un rancho. Sus caballos, famosos en otro tiempo, caen en desdicha el día que el viejo Otis Haywood Sr. (ese mítico Keith David), fallece en extrañas / rocambolescas circunstancias atravesado por una moneda . Su hijo OJ, Daniel Kaluuya es el amo, dirige un negocio en caída libre, mientras que su hermana Emerald (Keke Palmer), hace de su capa un sayo. Un día algo pasa y ante OJ y Emerald se abre la puerta de lo imposible, lo inconcebible y lo irracional. Del deseo por ser el centro de atención de todos, y de hacerse de oro en cero coma, se nos traslada a un aventura repleta de momentos escalofriantes, donde la tensión no deja de presionarte. Ahí es donde ¡Nop! visita y enarbola una bandera que tributa a lo bestia evocando mitos de la aventura fantástica como son Tiburón (Jaws), La guerra de los mundos (War of the Worlds), Señales (Signs), Encuentros en la tercera fase (Close Encounters if the Third Kind) o Jurassic Park / King Kong.

Obsesionados por el misterio de ¡Nop! los hay en todas partes
Obsesionados por el misterio de ¡Nop! los hay en todas partes

Entre medias hay espacio para un desconcertante pasado en forma de serie de televisión, tan de moda ahora, donde de vemos en modo espejo miniaturizado un reflejo de lo que ocurre a lo largo de la historia principal… ¡Nop! es además obsesión por el cine, por llevar al límite de lo imposible, sobrepasándolo, las ideas mas arriesgadas. Está claro, en ¡Nop! tenemos evidentes equivalentes a Brody, Hooper o Quint… ese Michael Wincott deseoso de llevar todo más allá como hiciera un desquiciado Robert Shaw en el clásico del verano, o el tecno adicto Brandon Perea, también tenemos una especie de Roy Neary en la piel de Steven Yeun… vamos, que hay de todo en el maravilloso film de Jordan Peele.

Lo dicho, en lo más alto de este año, cine de terror, pero cine de aventuras, comedia, fantasía… gloria bendita.

Un cartel diferente de ¡Nop!
Un cartel diferente de ¡Nop!

Los comentarios están desactivados
 

Hace ya unos días llegó a la pequeña pantalla, servicio de streaming Disney+, Prey de Dan Trachtenberg, una nueva visita de la famosa criatura Depredador, pero desde un punto de vista bastante diferente. Tras casi 40 años de historia a sus espaldas, la creación de Jim y John Thomas se reinventa trasladando la acción a un momento impropio y para nada esperado, amén de cambiar las reglas hasta ahora establecidas. La costumbre siempre ha sido ver a los protagonistas de los diferentes films de la saga armados hasta los dientes, con potencia de fuego como para arrasar un edificio completo, y, por qué no, relativamente ciclados y muertos de calor… Prey da un giro de 180 grados y nos propone enfrentar al humano contra el monstruo unos cuantos siglos atrás en el tiempo y, para rizar el rizo, con una joven india con ansias de demostrar como centro de la aventura.

Amber Midthunder, presa y cazadora en Prey
Amber Midthunder, presa y cazadora en Prey

Prey transita en dos terrenos muy diferentes. Dentro de la evidente incredulidad de la saga Predator tras su gloriosa y musculosa primera parte, Prey no cae en las rocambolescas y pizpiretas aventuras de Depredador 2, con ese increíble Danny Glover brincando por los tejados de esa calurosa Los Ángeles mientras que Gary Busey ponía caras, pero tampoco se pasa de vueltas visitando descarriados sectores estelares como en Predators, ni pergeñando gamberras batallas épicas cargadas de locos momentos como las vividas en Predator, la de Shane Black y Fred Dekker de 2018. Prey digamos que es más costumbrista, fiel a la idea original de un Depredador cazando, pero libre como la tribu de indios que se enfrentan a invasores diversos… depredadores todos ellos venidos al caso. Trachtenberg, director de la muy molona Calle Cloverfield 10 (10 Cloverfield Lane), se embarca en una historia complicada, con una historia donde prima lo tribal / invasor sobre lo sobrenatural llegado del espacio hasta, claro está, que la criatura decide dar el primer paso… (en ese momento gloria bendita).

El nuevo Depredador que vemos en Prey... un modelo atípico
El nuevo Depredador que vemos en Prey… un modelo atípico

Dentro ya de ese lo admito / no lo admito, Prey funciona bastante al límite, sobre todo por los antecedentes que nos han contado desde hace ya casi 40 años y donde primaba el músculo siempre. Se toma su tiempo, largo todo sea dicho, para presentar lo que podría ser un primer encuentro entre un humano y un Depredador. Empodera a una mujer, en tiempos donde dudo que este concepto si quiera se planteara, y propone el film como un reto para alcanzar el grado de madurez de la protagonista, al tiempo que establece unos convincentes nexos entre este film y sus futuros antepasados. Ese trabuco de Raphael Adolini de 1715 que vimos en Depredador 2 y del cual ya se pretendió dar sentido en el cómic "Predator: 1718", creado por Henry Gilroy y Igor Kordey, y publicado en julio de 1996, ese "si sangra, podemos matarlo" de Dutch (Arnold Schwarzenegger) repetido por Taabe (Dakota Beavers), etc. Además, todo apunta a primer encuentro por la actitud de la criatura, cazando una cobra, un lobo, un oso y acto seguido, un ser humano. El Depredador además va un poco en modo berserker, no parece estar tan preparado como en futuros encuentros, por lo que da más sensación de que sí, esta podría ser la primera vez que humano y criatura se ven las caras.

En definitiva, Prey mola, funciona mejor en sus descontrolados últimos 30 minutos donde el cruce entre Depredador y ser humano se establece, pero por otro lado palidece en la construcción de la historia durante unos largos 60 minutos… aunque sea para probablemente establecer el origen. Se puede ver y desde luego disfrutar.

Uno de los pósters de Prey
Uno de los pósters de Prey

Los comentarios están desactivados
Publicado por Uruloki en
 

Al fin he podido ver otra de mis añoradas esperanzas de este año, y que para hacerla más desesperante ha caído en medio de un extremadamente caluroso verano de 2022. Resulta que Alex Garland, director de la maravillosa Ex-Machina y Aniquilación (Annihilation), y guionista de la no menos brutal Dredd, La playa (The Beach), 28 días después (28 Days Later…) o Sunshine, y responsable de esa curiosa rareza metafísica que es "Devs", se nos embarca en Men, una propuesta prioritariamente rara, o muy rara, que fusiona el terror más bendito, adornado con un fondo folk horror, aspectos de pura ciencia ficción y esencias personales amén de vivencias dolorosas y catárticas.

Harper en uno de sus momentos de crisis existencial
Harper en uno de sus momentos de crisis existencial

Men nos cuenta el viaje de redención de Harper (Jessie Buckley) tras haber perdido, ¿suicidio o paso en falso?, a su marido James (Paapa Essiedu). No sabemos exactamente en qué momento del duelo Harper se va a la campiña inglesa con idea de pasar unos días en un caserón comandado por Geoffrey, la primera encarnación de un superlativo Rory Kinnear, actor que veremos adoptar diversas formas / entidades en Men. El film de Garland, o una posible percepción del mismo, plantea una historia donde la violenta relación padecida por Harper se ve reflejada, merced a una simbiosis de su subconsciente, en algún tipo de grotesca entidad que rodea el bosque donde se encuentra la casa. De alguna forma James está presente, ya sea como niño, casero, ser planta, cura, policía o gamberro de bar. Los papeles de Rory Kinnear son en el fondo James, o al menos lo es ese ser que encarna el icónico actor y que vive debajo de un puente, y por ende son la representación de la misoginia como tema crítico a tratar.

Rory Kinnear como el hombre planta que refleja la actitud de James
Rory Kinnear como el hombre planta que refleja la actitud de James

Garland narra una historia plagada de metáforas que reflexionan sobre la tóxica figura masculina de la relación que ha terminado, ya de paso, y para liarla parda se saca la chorra y nos adentra en una locura multiforme, donde el trabajo de efectos visuales parece sacado de la perversa y extrema mente del genio de los FX grotescos Screaming Mad George (el visionario tras las tortuosas suculencias de Society por ejemplo). A otro nivel está también el uso del color en la fotografía, con tonos naranjas rojizos quemados que transmiten el peor de los terrores en la pareja, frente al aprovechamiento del verde como paleta para una campiña donde lo que sea que vive en el bosque tiene más que decir. Rob Hardy, habitual de Garland hace un trabajo maravilloso, ala. La música, como siempre, cosa de Ben Salisbury y Geoff Barrow, acompaña.

Uno de los momentos de castigo... fruto prohibido, en los tiempos que corren
Uno de los momentos de castigo… fruto prohibido, en los tiempos que corren

En fin, Men mola, es un film muy raro y francamente no dejará conforme a todos los que lo vean. Tiene su chicha, toca un tema espinoso y desagradable, y los envuelve de terror y folklore, fondo religioso, etc. De regalo, los últimos 20 minutos más desconcertantes de lo que van de año.

Póster de Men de Alex Garland
Póster de Men de Alex Garland

Los comentarios están desactivados
Publicado por Uruloki en
 

Hoy era el día para participar en una charla en el Fancine de Lemos 2022 con motivo de la exposición permanente del MUVI y centrada en la relación entre el cine y los videojuegos, pero el COVID no atiende a compromisos, no te preguntar si ahora te viene bien… te toca, te machaca y te deja enclaustrado cual monja de clausura. En fin, pese a la tristeza y frustración, toca regresar al blog… que hace ya casi dos meses que no lo visito. La última grata sorpresa que me echado a los ojos ha sido The Black Phone, el regreso de Scott Derrickson tras su breve periplo por el universo Marvel, ahora convertido en multiverso de locura (intentaré dedicarle un rato a Sam Raimi también).

Finny... el prota
Finny… el prota

The Black Phone es una nueva pequeña joya, delicia que cabalga a lomos del terror y el thriller, de los sobrenatural y la aventura teenager que el padre del hijo solía explorar con bastante frecuencia. The Black Phone es una adaptación del homónimo relato de Joe Hill, hijo de su ilustrísima eminencia Stephen King… y se nota, vaya que si se nota. Desconozco la obra, pero si Derrickson, acompañado por su inseparable co-guionista C. Robert Cargill (inseparables desde la magnífica Sinister), han plasmado el tratamiento de personajes de la obra de Hill, no queda más que quitarse el sombrero… negro. The Black Phone es un film muy sencillo repleto de esos tantos clichés que hemos visto en un buen ciento de películas: que si los abusones de turno; que si el colega malote que en el fondo es mejor amigo del prota y que de paso le enseña mates; que si ese momento de la pre adolescencia donde te gusta esa compañera de clase con la que no te atreves pero que sin embargo se interesa por ti; que si el padre que pega a sus hijos… en fin, todos y más. Sin embargo, Derrickson y Cargill nos envuelven con estos clichés para decorar una historia tétrica, perversa pero fabulosa, entretenida, muy bien filmada y, por qué no decirlo, resulta casi perfecta.

El villano... una de sus caras
El villano… una de sus caras

The Black Phone cuenta la historia de Finny (Mason Thames), el típico chaval que no tiene media hostia, con una hermana (Madeleine McGraw) que habla por los codos y que va al colegio porque le mandan, ya que las tortas y los abusones le esperan a partes iguales. Un misterioso personaje que rapta niños, y un secreto que no voy a desvelar, dan forma a una absorbente historia que ya de paso cuenta con uno de esos repartos teen que molan. Todavía recuerdo cuando vi Super 8 de J.J. Abrams y allí estaban Joel Courtney o la flipante Elle Fanning, aun ahora si lo piensas, ese reparto de la gloriosa "Stranger Things" (en su primera temporada) era pura química, y ahí están algunos de ellos… y en The Black Phone pues ojo sobre todo con Thames. Añadidle a un muy perturbador Ethan Hawke, una máscara diseñada por el icónico y ya jubilado Tom Savini, y ya está. Una historia que funciona como un tiro pese a que muchas cosas pensarás que ya las has visto.

En fin, eso, The Black Phone ahí se coloca, en la parte superior en cuanto a mejor terror de este 2022, si bien navegue en un mar donde el miedo, los sobrenatural y la aventura más teenager, se mezclan para dar como resultado un caldo primordial de los buenos.

Cartel de The Black Phone
Cartel de The Black Phone

Los comentarios están desactivados
Publicado por Uruloki en
 

Vale, sé que llego tarde y que ahora debería estar hablando de Doctor Strange en el multiverso de la locura… pero no, admito que voy con forzado retraso y hoy me dedico a escribir sobre X de Ti West, la última gran propuesta del cine de terror y, por lo pronto, la primera joya de género de este 2022 (esperada eso si).

Mia Goth, rutilante estrella en X... aquí encarnando a Maxine
Mia Goth, rutilante estrella en X… aquí encarnando a Maxine

Valga decir que Ti West es un director bastante irregular, responsable de obras referentes dentro del terror moderno como pueden ser La casa del diablo (The House of the Devil) o el found footage The Sacrament, pero también padre de cosas más flojeras como Los huéspedes (The Innkeepers), aunque es de esos pocos que decidió abandonar el género y abrirse a otras propuestas diferentes como el notable western El valle de la venganza (In a Valley of Violence), curiosamente su última incursión en cine antes de dedicarse a peregrinar por el mundo de la televisión con episodios en series como "Wayward Pines", "Tales from the Loop" o "Them". Seis años de sequía después West regresa, y lo hace por la puerta grande, la de mayor tamaño que podáis imaginar, con A24 confiando ciegamente en este su periplo, y no… X no es terror elevado, el gloria bendita.

Brittany Snow como Bobby-Lynne, y Kid Cudi como Jackson, pareja con sofocante química
Brittany Snow como Bobby-Lynne, y Kid Cudi como Jackson, pareja de sofocante química

X es un viaje al pasado, merced a un excelso trabajo de adaptación en su estética, un regreso a aquel cine que poblaba pantallas hace muchos años en las salas de cine más de pueblo a lo largo y ancho de los USA (las sesiones grindhouse) con esa estética caduca pero singular, sin prejuicios, regada con generoso gore, mucha mala baba, bastante humor negro y referencias a iconos cinematográficos de aquellos días (el lago de Viernes 13 de Sean S. Cunningham, la mansión de La matanza de Texas de Tobe Hopper, o hasta un guiño a La noche de Halloween de John Carpenter al hacer uso de "Don’t Fear the Reaper" de Blue Öyster Cult). X es una de horror redneck con un equipo de rodaje de cine porno setentero haciendo frente a un matrimonio de ancianos en medio de la nada. Una casa, su granero, un lago cercano… suficiente para construir una historia malsana, por momentos muy enfermiza, pero donde West logra algo sumamente complicado, hacer que el corto reparto que riega su mejor film hasta la fecha sea sencillamente maravilloso, lo que hace que disfrutes si cabe más con cada minuto de metraje.

La espalda de Mia Goth en X... y en ese referencia lago
La espalda de Mia Goth en X… y en ese referencia lago

La historia de X transcurre en un breve plazo de 24 horas. Un día con su noche: un día donde se rueda una porno setentera; y una noche donde pasa lo que todos sabemos que va a pasar… asesinatos. West hace algo muy inteligente y nos adelanta el desenlace final, ocultando eso sí quiénes se encuentras debajo de las sábanas que han posado los marshall de rigor sobre los cadáveres. Tampoco hay mucho secreto en la autoría de los crímenes, tenemos por un lado al personal de la futura peli porno con director, actor principal, un par de actrices, el cámara (Owen Campbell) y la técnica de sonido (Jenna Ortega), y por el otro a un matrimonio de ancianos. Ojito a la jugada maestra de West, otra más, la magnífica Mia Goth es Maxine, actriz no de método, adicta a las drogas y musa de Wayne (Martin Henderson), pero al tiempo es Pearl, la anciana esposa de Howard (Stephen Ure)… y que junto a su marido y el efecto causado por los telepredicadores tienen un particular sentimiento hacia los desviados, pervertidos, y demás cochambre surgida en esas décadas de inicios de gustosa depravación en formato vídeo.

No hace falta mucho para saber que de estos más de uno acabará como el rosario de la aurora
No hace falta mucho para saber que de estos más de uno acabará como el rosario de la aurora

Lo mejor que tiene X es además que Ti West no se oculta, no promete y luego no muestra. A cada minuto sabes qué va a pasar, cuando West posa su cámara sobre ese clavo en esa tabla de granero sabes qué te espera. Por lo tanto, hay sustos muy buen elaborados, pero a la vez no hay secretos, y el body count cae por su propio peso adornando una de terror gore no exenta de comedia y mucho humor negro. X es gloria.

Cartel molón de X
Cartel molón de la igualmente molona X

Los comentarios están desactivados
Publicado por Uruloki en

Uso de cookies

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies

Llévame a lo más alto!