Con eso de que este fin de semana se ha estrenado en salas comerciales, toca hablar de otra de las películas que pude ver en el pasado Festival de Sitges. Es el turno por lo tanto de El hombre de las sombras (The Tall Man, 2012), el regreso a la aventura cinematográfica de Pascal Laugier, ese director francés que nos dejó con grandes sensaciones y mucho mal cuerpo tras presentarnos la tremenda Martyrs en el 2008. Acumulando la friolera de cuatro años en silencio, Laugier regresa para ofrecernos una historia bastante clásica, el omnipresente en nuestra niñez mito del hombre del saco, vestida por otro lado de supuesto film de terror con bastante, quizás demasiado, truco. Este discutible doble juego, digamos que no fue muy aplaudido por el fan de ese otro Laugier, no debe ocultar sin embargo una concepción de la leyenda francamente original, con un desarrollo aceptable y un desenlace que te deja, o ese fue mi caso, bastante ojiplático… ¿y defraudado? Porque si, la obra de Laugier, de paso debut en las fértiles tierras de Hollywood, tiene cero de terror, aunque predomine todo el rato ese engaño que hace creer al espectador que si lo es al tiempo que se añaden interesantes complementos a la historia como que el destino de cada uno se rige por el lugar en el que naces, lo imposible de los cambios de rumbo cuando tu entorno no lo favorece o el desarraigo social debido a la pobreza. Laugier, al igual que en Martyrs responsable absoluto de lo que vemos al ser director y guionista, viene a contarnos mucho más que ese terrorífico acoso por parte de un ser nocturno que se dedica a empobrecer si cabe más la tristes vidas de los que padecen en exceso, y se apoya para ello en la notable interpretación de Jessica Biel, en verdad sorprende el trabajo de esta actriz hasta ahora encasillada en papeles más bien complementarios, que contando con ayudas de veteranos como Stephen McHattie o William B. Davis, logra dar empaque a una trama que saca completo jugo de todos los tópicos del thriller de terror más habitual pero que en el fondo no es para nada lo que uno va creando en su cabeza. Merece un visionado, por lo menos para saber si uno debe cagarse en Laugier o agradecerle la osadía que se saca de la manga…

Nos encontramos en el decadente pueblo de Cold Rock. En el una joven enfermera llamada Julia (Jessica Biel), debe hacer frente a esas inclemencias sociales propias de un lugar que se hunde más y más en su propia miseria sin visos de salir de ella. Pero en Cold Rock pasa algo más, los supersticiosos atribuyen esta fatídica racha a las extrañas desapariciones de niños a manos de lo que ellos conocen como El hombre alto, un algo que de cuando en cuando se cuela en el lugar para raptar a uno de los niños que allí mal viven. El tema se pondrá peleón cuando sea Julia la que sufra en sus propias carnes el ataque del Hombre alto y este rapte a su hijo.

Cartel de El hombre de las sombras
Cartel de El hombre de las sombras