Esta Navidad que ya se nos ha terminado la he pasado, entre otras muchas cosas, disfrutando como un enano con "Trollhunters", adaptación en formato serie animada de la homónima novela para niños escrita por Guillermo del Toro y Daniel Kraus, e ilustrada por Sean Murray.

Producida por Dreamworks Animation y Cha Cha Chá Films, esta serie que se puede ver en Netflix desde hace unas cuantas semanas cuenta la historia de un chaval de 15 años llamado Jim Lake Jr. (tenéis la oportunidad de escuchar la voz de Anton Yelchin en uno de sus últimos papeles), que sin comerlo ni beberlo se ve envuelto en una aventura increíble al comprobar como colisionan ante sus ojos el pueblo en el que vive, Arcadia, y el fantástico mundo de los trolls. El tema es que Jim se encuentra un extraño artilugio con forma de reloj de bolsillo del tamaño de la palma de una mano que le acabará transformando en el Cazador de Trolls, una figura legendaria que a lo largo de muchos siglos se ha hecho cargo de mantener la distancia entre el mundo en el que vive y el de los trolls, al tiempo que se ha enfrentado al lado más oscuro de estos últimos. Pero Jim no estará solo en esta aventura, además de sus compañeros de instituto Toby (Charlie Saxton) y Claire (Lexi Medrano), crecerá como persona y como Trollhunter gracias a las enseñanzas de dos trolls llamados Blinky (impagable Kelsey Grammer en un personaje tronchante) y AAARRRGGGHHH!!! (Fred Tatasciore).

Pero no sólo eso, con gran soltura y apoyado por un grupo de guionistas y directores que saben muy bien lo que hacen, en el primer rol gente como Kevin y Dan Hageman, responsables de las historias de hits de la animación más simpática con Hotel Transilvania (Hotel Transylvania) o La Lego película (The Lego Movie) en su currículum, o Marc Guggenheim, en el segundo lado el granadino Rodrigo Blaas, Elaine Bogan o él mismo, Del Toro produce una historia perfectamente equilibrada con una hilo que está presente durante toda esta temporada, al tiempo que divide la narración en dos grandes arcos argumentales protagonizados por dos grandes villanos y sus acólitos. Por un lado la historia del Cazador de Trolls vs. Bular (Ron Perlman), y la segunda la de nuestro joven protagonista y Angor Rot (Ike Amadi).

Con "Trollhunters", lo que Guillermo del Toro pone sobre la mesa son esos grandes valores que tanto le identifican, al tiempo que deja nuevamente claro que lo suyo es estrujarse el cerebro y sacarse de la manga un universo completito repleto de magia y fantasía como quien sólo estaba de paso. Si uno echa un ojo a aquel mercado de trolls, duendes y hadas de Hellboy II: El ejército dorado (Hellboy II: The Golden Army), verá que muchos de los detalles que Del Toro trató en aquel momento están ahora reflejados en este nuevo mercado animado. No sólo eso, si no que si uno ha leído Hellboy, y las primeras obras de Mike Mignola y su héroe rojo, reconocerá en "Trollhunters" suculentas dosis del folklore que Mignola cruzaba en la vida de Hellboy. El nivel de la animación y los detalles con que Del Toro y su equipo han decorado todo, hacen de "Trollhunters" una serie que merezca mucho la pena disfrutar. Además, desconozco el presupuesto con el que han contado, pero con ingenio, misterio, suspense y sobre todo calidad, "Trolhunters" se convierte en un must see.

En definitiva, estamos ante una primera temporada compuesta por 26 episodios de unos treinta minutos con un ritmo endiablado, perfecto para pequeños y no tan pequeños, con altas dosis de acción, de espada y brujería, de humor y mucha emotividad. Para ver en familia.

Cartel de "Trollhunters"
Cartel de "Trollhunters"