AVISO  Por favor, si no has visto la película vete a verla cuanto antes y si no has leído el cómic vete a comprarlo y disfrútalo con calma. Esta opinión acepta spoilers porque creo que son necesarios para discutir a todos los niveles que el film merece.

Igual que ocurriera en 19861987 cuando DC Comics publicó en 12 entregas el cómic de Alan Moore y Dave Gibbons, el 6 de marzo de 2009 marcará un punto de inflexión dentro del mundo del cine comiquero tras ser estrenada Watchmen (2009) de Zack Snyder, la rigurosa adaptación de la significativa novela gráfica. Si bien este punto de inflexión se debe a la propia complejidad y marcada diferencia de la obra de Moore y Gibbons con respecto a la habitual línea de los films de superhéroes, lo obstinado de Snyder por ser siempre fiel, hasta el extremo en ciertas ocasiones, hace que el 99% de la obra gráfica esté presente en la versión en pantalla grande, un trabajo encomiable. Watchmen es una gran obra, con una historia fabulosa que llevada al cine ha encajado como un guante de seda en el mejor estilo del thriller, el cine de conspiraciones y el utópico mundo de los superhéroes. Con el salto al celuloide ha ganado un gran aliado que dará a conocer la obra a una nueva generación de admiradores del cómic.

Póster español de Watchmen

Junto a The Dark Knight / El caballero oscuro (2008), Watchmen da un paso más en el camino que demuestra que el cine basado en viñeta y grapa puede ser mucho más que músculo y efectismo. Watchmen no es un film de superhéroes, aunque los tenga, y se centra más en mostrar la ucronía de un grupo de héroes ocultos que en el pasado fueron pieza clave del día a día en las ciudades donde residían y que en el presente de 1985 deben permanecer ocultos sin actuar porque la ley se lo impide. En plena crisis mundial con la Guerra Fría a punto de desembocar en un enfrentamiento nuclear entre Estados Unidos y la Unión Soviética, el asesinato de uno de estos "vigilantes" llevará a que el único que sigue en activo, pese al impedimento legal, investigue el crimen de su viejo compañero convencido que alguien quiere acabar con los enmascarados ahora retirados. En este punto arranca una historia donde conoceremos la desagradable vida de Edward Blake a.k.a. El Comediante (Jeffrey Dean Morgan) y las vicisitudes de sus viejos compañeros: Jon Osterman a.k.a el Dr. Manhattan (Billy Crudup), superhéroe oficial, empleado del gobierno y único ser en la tierra con poderes sobrenaturales debidos a un error en un fatídico experimento nuclear, Laurie Jupiter a.k.a. Espectro de Seda II (Malin Akerman), pareja sentimental de Manhattan, Dan Dreiberg a.k.a. Búho Nocturno II (Patrick Wilson), héroe retirado y único que parece mantener relación con todos sus viejos compañeros, Adrian Veidt a.k.a Ozimandias (Matthew Goode), el hombre más inteligente del mundo y propietario de un imperio comercial, y Walter Kovacs a.k.a. Rorschach (Jackie Earle Haley), el auténtico investigador de la conspiración contra los Watchmen.

Zack Snyder y su equipo ha sabido reflejar a la perfección el desalentador universo paralelo de esa hipotética era donde la presidencia de Richard Nixon parece llegar a su fin con un holocausto nuclear que acabará con el mundo entero. El film puede parecer lento pero es que la realidad es esa, la novela es difícil de leer y demasiado densa como para que transcurra como si no te enteraras. Las interioridades de los personajes, sus miedos al presente, recuerdos de viejas hazañas y secretos del pasado que deben permanecer ocultos, hacen que el espectador admire el verdadero sufrimiento de alguien que acostumbrado a ser glorificado ha tenido que pasar al más auténtico anonimato. Visualmente es una perfecta traslación de la viñeta al celuloide. No hay nada como volver a echar un vistazo a cómic en nuestras casas y admirar el superlativo trabajo fotográfico de Snyder. La película no pretende aportar nada más a la historia escrita por Alan Moore, si bien hace uso de ciertas licencias visuales en forma de violenta dureza que en el cómic no es que llegara a mostrarse, pero si intuirse. En definitiva, un trabajo a tener en cuenta y pasarse a ver alguna que otra vez para seguir buscando el perfecto trabajo de reflejo que ha osado llevar adelante Zack Snyder.

¿Y esas cosas que echamos en falta? Pues aquí no tengo más que entrar en defensa de la adaptación. El corte del director nos mostrará tanto la película con las consiguientes intercalaciones de los Relatos del navío negro, Tales of the Black Freighter (2009), y, espero, referencias a Bajo la máscara. Hacerlo en el cine hubiera sido un suicidio si no fuera optando por la división del film en dos partes, algo del todo inadmisible porque el tiempo entre cada película hubiera hecho perder el hilo de la compleja historia. El trastocado final merece un aplauso porque es sabido que el giro de la novela gráfica haría a mucha gente salir de la película aborreciendo el inclasificable final. El elegido por Snyder es muy acertado y mucho más cinematográfico que el imaginado por Moore en los años ochenta. Que si, que entiendo a los que dicen que si no lo quiere poner que no adapte la novela gráfica, pero hay que ir más allá de este detalle y pensar en el inteligente cambio y en el gustazo de poder ver / leer Watchmen en una sala de cine..