Momento de hablar de otra de las joyas de este 2013 en el Festival de Sitges. El pasado domingo se pudo ver en el Auditori Bienvenidos al fin del mundo (The World’s End, 2013) de Edgar Wright, episodio final a la definida como The Three Flavours Cornetto Trilogy, The Blood and Ice Cream Trilogy o la Trilogía del Cornetto, esta última la forma más sencilla. Qué decir, un cierre mayúsculo, una oda a la amistad y una aventura muy divertida que saca mucho jugo al aspecto más nostálgico de la ya inmortal amistad en pantalla entre Simon Pegg y Nick Frost. El trío calavera, padres putativos en modo director, guionistas y actores de las ya míticas Shaun of the Dead (2004) y Hot Fuzz (2007), acompañados esta vez por Paddy Considine, Martin Freeman, Eddie Marsan y Rosamund Pike, además de gustosos cameos de Steve Oram, Pierce Brosnan, David Bradley o la voz del mismísimo Bill Nighy, nos presentan una historia de reencuentro, mucha amistad, defecto de madurez o aventura etílica servida en pintas. Eso, macarras trasnochados y mucho más que no se puede contar pero que hay que ver porque es un cierre como la copa de un pino. Una banda sonora superlativa y una descacharrante invasión extraterrestre sirven para cruzarnos nuevamente con una aventura genial donde Simon Pegg se transforma y rompe moldes. Repetiré cuando se estrene en cines, a final de mes.

Gran cartel este de The World's End
Gran cartel este de The World’s End